Los re-encuentros te recargan el alma y el corazón.

"No te dejes abatir por las despedidas. Son indispensables como preparación para el reencuentro y es seguro que los amigos se reencontrarán, después de algunos momentos o de todo un ciclo vital"

(Richard Bach)



A lo largo de tu vida conoces a muchísimas personas a las que por diversas razones dejas de ver. Porque viven en otro país, porque sus circunstancias han cambiado, porque no sabes ni dónde están, e incluso porque desconoces la razón del distanciamiento.

Hace unos meses conectaron conmigo compañeros/as de la universidad y nos hemos vuelto a ver, hemos comido un par de veces y hemos comprobado como el feeling sigue allí (foto portada).

Volvieron a aparecer en mi vida Cae Piñol y Sonia Rodríguez, después de años sin saber de ellas y ahora estamos disfrutando de una conexión laboral y personal estupenda.

También conectó vía linkedin Josep Junoy, ex-alumno de la UAB con el que comí recientemente.

Algunos re-encuentros me han permitido volver a disfrutar de Joaquín Lorente, Toni Segarra, Ricardo Pérez, Agustín Elbaile, Agustí de Uribe, Aina Cortina, Melissa García o Sam Júdez.

Se acerca mi cumple y me pongo romántico. Pienso en nombres y apellidos perdidos en la distancia emocional que me encantaría volver a ver. No niego que en ocasiones yo he sido el único culpable de esta situación.

También es cierto que vamos con la agenda llena, muchas veces no damos abasto con tanto compromiso laboral y social.

No somos conscientes del valor de la amistad y de lo valiosas que son algunas personas que tienen la capacidad de inspirarte, motivarte, ilusionarte, hacerte sonreír, compartir experiencias, evadirte o perseguir sueños.

Cada conversación con ellas te parece diferente, te sientes vivo, sincero, abres tu corazón y tienes la sensación de que estarías horas y horas con alguien tan interesante.

Especialmente con la gente que sigue demostrando que su "gramo de locura" sigue intacto, que la vida no la ha llevado a repetir tópicos y dejarse llevar por los estereotipos.

Silvia Conde, excelente fotógrafa, está en China, un poco lejos, Denise Bacon en Berlín, más asequible, en Asturias tengo a Montse, Tere, Rubén y Nader, en Alicante una larga lista comandada por Jesús y Diana, en La Coruña a Luis y Rosa.

Sin embargo, lo que más llama la atención son aquellos seres maravillosos que están en tu misma ciudad. No hemos sabido encontrar puentes, conexiones o maneras de re-encontrarnos. Con Gara y Joan Miquel estamos en el buen camino, me alegro. Con Maricle y family no hay ningún problema, pero nunca quedamos. Chico y Angélica han vuelto desde Brasil, 6 años de ausencia que celebramos con una visita a Disco 100 y una bebida en el "Bocca de Bonifacio", espero mucho de nuestras conversaciones y de nuestras experiencias juntos.

Podría continuar con Montse, la mejor peluquera de Barcelona, generosa, divertida y excelente persona. Tal vez le da corte quedar...

Alba, alias K, siempre encuentra el lado diferente a la vida, es una gran creativa, atrevida, "loca" e irrepetible. Missing desde hace 5 años.

Gemma Ansodi, la gran rrpp que me presentó a la que es para mí la mejor partner en implicados, Laia Vicente, sigue discretamente "escondida".

Maite Garrido, la enfermera más profesional del mundo mundial, lee mis posts pero no encontramos el momento para vernos.

Hace un año volví a conectar con el gran músico brasileño Danilo Pinheiro, con el que compuse unas canciones hace ya muchos años. Sigue igual. Divertido y apasionado de la música (foto).

En una sociedad que va a una velocidad de vértigo, cuando ya no nos impresiona que se hable de 3000 muertos en las noticias o de un caso más de malversación de fondos, cuando el fútbol y la prensa del corazón acaparan todas las conversaciones, concluyes que compartir experiencias con personas que merecen la pena tiene sentido.

Es algo que debemos cuidar, mucho más que nuestro coche, nuestra cartera, nuestro egoísmo o nuestra colección de películas. No hay nada mejor que sentir y hacer sentir. No hay nada mejor que vivir con intensidad.

Por eso, por mi cumple no pido nada material, pido algún re-encuentro. 

El sabor de esa comida, el sonido de esa canción, el significado de esa camiseta, las palabras y los símbolos que forman parte de un código personal, las fotos y los videos, los besos, los abrazos y las lágrimas, son informaciones que se graban en tu ADN y te hacen sentir muy bien.

Como he dicho más de una vez "still crazy after all these years", cumplo años, pero sentar la cabeza, eso nunca.

Me considero dreamer, believer y crazy. Y tengo gasolina para rato.

Tengo la suerte de contar con tu complicidad y tu energía,  que es muy importante para mí.