Cuando escucho música se me enamora el alma. Y el cuerpo, claro.






Para mí escuchar música es un ritual que sirve para mantenerme en forma. Me siento y disfruto. No hago nada al mismo tiempo. No camino, no navego, no trabajo. Simplemente, dejo que las notas y las voces se apoderen de mi alma. Que la letra penetre en mi piel. Me dejo llevar y me siento inmensamente feliz.

Cada canción es una historia que me entra por los oídos y me llega al corazón.

Porque la música es un mar interminable que te permite surfear por las olas del soul, el pop, el folk, el rock, la electrónica, el hip hop, el drum and bass, el ambient, el grunge, el punk, el jazz o la fusión. 

La música estimula la creatividad, es terapéutica y sanadora, te hace conectar con tu "yo" más íntimo.

Nunca se acaba, nunca eres experto, tan solo debes tener la mente abierta y disfrutar.

La música es un vuelo sin motor al país de las sensaciones, que disfrutas con los ojos cerrados, entre nubes de violines y un cielo azul intenso.

La música es un volcán que descarga adrenalina, un baile de lava y fuego que no se detiene hasta la madrugada.

La música es un club semi vacío, escondido en una callejuela oscura, una invitación a la melancolía y al olvido.

La música es un sofá, ropa cómoda, un whisky con hielo y muchas ganas de vibrar.

La música es un ritual entre edredones, un movimiento sensual, un saxo que seduce a las caricias, una letra que canta entre gemidos.



 La "Mala" Rodriguez en el badulake.


La música es un balcón a lo nuevo, un paisaje diferente, un sonido inesperado, una vista inédita, un rincón para la sorpresa.

La música es la banda sonora de tu vida.

La música puede cambiar el mundo porque puede cambiar a las personas.

La música es una montaña rusa, una barca en un lago tranquilo o un sonido en el silencio.

La música es contagiosa y no tiene vacuna.

La música es cantar, aunque sea en la ducha, aunque lo hagas mal, aunque te dé vergüenza, cantar te libera y te motiva.

La música es bailar, aunque estés solo/a, aunque bailes mal, aunque te dé vergüenza, bailar te relaja y te mantiene en forma.

La música es contemplar un paisaje inmenso desde la cima de una montaña, con la sensación de no saber por dónde empezar a descubrir.

La música es escuchar esa canción mil veces, porque te sigue gustando y porque sigue teniendo mucho significado.

La música es intercambio, es conversar, es recomendar, es descubrir.

La música es universal, es mensaje, es arte, es tan sutil como intensa, es una historia de 4 minutos, es luz, es inspiración, es pasión, es inmensidad.



Richard Wakefield, letrista músical, profesor de la asignatura "música y publicidad", Universidad Pompeu i Fabra, Barcelona. Socio de "Músicos por la salud".



"Estoy seguro de que la buena música alarga la vida"

(Jehudi Menuhin)


https://youtu.be/O3FhoceKw_g

Geejay, complicated world

https://youtu.be/-tedfA0qy_Y

Geejay, stronger

https://youtu.be/nn0tbjtym0w

Geejay, horizon 

https://youtu.be/CZS0zEadWi8

The Clantons, "footsteps" 2022.




En Beat Garden.




Comentarios

Entradas populares