No me pude despedir de ti.

El cielo se ha llenado de estrellas de forma inesperada. Los caminos se han quedado vacíos. El arco iris prefiere no salir.

Las vimos subir desde la distancia. Nos hicieron reír y llorar, nos dieron ilusión, inspiración, cariño, compañía, conversaciones y consejos. Nos dieron experiencias, motivos, amor, cariño y respeto.

No pudimos despedirnos ni tocarlas, se marcharon dejando corazones rotos. Aunque ahora brillan con los recuerdos, tal vez no era el momento. No pudimos dejar que volasen las lágrimas, se quedaron entre cuatro paredes, entre guantes de látex y mascarillas, con las miradas desnudas y los jardines solitarios.

No pudimos decir sus frases favoritas, ni ponerles su canción, ni hacerles sonreír con esas anécdotas tan divertidas. Ni decirles "te quiero"cerca de su oreja.

Quedaban muchas cosas por hacer. Mucho por descubrir, mucho por inventar. Esas tardes de otoño con el bosque ocre, la inmensidad del mar azul, los amaneceres rojos, la hierba verde intenso, la habitación gris, las sensaciones rosa y la prensa amarilla.

Quedaban esos sabores tan especiales, esos platos tan deliciosos, esos postres tan golosos.

Pero entre sueño y sueño les engañó un virus. Lucharon con valentía las personas de batas verdes, pero nada pudieron hacer. Sus nombres están para siempre en ese lienzo azul oscuro, desde donde nos envían mensajes de amor y consuelo.

La primavera ha escondido sus rosas. Las calles silencian las sirenas, los gritos de los niños, los pasos, y allí, en una esquina solitaria nos parece escuchar sus voces.

No me pude despedir de ti, pero compartiré tus recuerdos las estrellas.

Dedicado a todas las personas fallecidas por coronavirus que no pudieron despedirse como se merecían. A sus familiares, amigos/as y compañeros/as, mis condolencias, mi respeto y mi cariño. 

La cifra final rondará las 100.000 personas, la mayoría con una edad de 60 años o más. Una pesadilla que se ha cebado con las residencias de personas mayores. Que no se vuelva a repetir jamás. 



"Caminaremos mirando las estrellas con la sonrisa de quienes no podrán estar"

"Gràcies per dedicar temps a escriure el que sents, és molt inspirador. És veritat, al cel hi ha moltes estrelles aquests dies, i també molta pau i temps per pensar en elles i agraïr-los el que han fet per nosaltres." Martina.

"Qué bonito y necesario, gracias Richard."  Mireia.

"Qué bonito". Eli.

"Muy bonito". Hajar.