Los/as corruptos/as de la corte del faraón (reality show remix 2015)

No entiendo porqué tenemos que pagar las facturas de los delirios de grandeza de los faraones actuales, que adoran sus ideas y adoran también los tesoros escondidos entre las piedras, con los que se han comprado mansiones, coches de lujo, viajes paradisíacos y ropa de alto standing.

Estoy hablando de  La Ciudad de la Luz en Alicante, Terra Mítica en Valencia, La Ciudad de la Cultura de Santiago, La Ciudad del Circo de Alcorcón, La Caja Mágica de Madrid, El Palacio de Congresos de Oviedo, el Centro Cultural Niemeyer de Avilés, La Ciudad de las Artes de Valencia... podríamos seguir con las seis estaciones fantasma del AVE, casi sin viajeros, con los aeropuertos inactivos de Castellón, Huesca y Ciudad Real...

...por estas pirámides presuntuosas pasan con suerte 10 personas un martes a las 6 de la tarde para tirar fotos y comerse un bocata. No me trago eso de la cuidad es ahora más bonita e interesante para los turistas. Más bien se trata de una vivencia surrealista que consiste en contar cuánta pasta se ha despilfarrado. En comprobar cómo y cuándo aparecen las goteras, se desconcha la pared, se agrietan los suelos y se quiebran los cristales. Ahora, para ver monumentos históricos no hace falta remontarse a los góticos ni a los romanos.

En pocos años, estas muestras de diseño de vanguardia están obsoletas, caducadas y abandonadas. Jordi Evole lo plasmó con su descaro habitual en Salvados y la conclusión es que aquí no se salva ni Dios, porque para elevar espejismos culturales necesitas una corte de cómplices con muy poco amor a la cultura y mucho amor a los euros.

No entiendo porqué casos tan evidentes y descarados de corrupción no han provocado dimisiones en cadena. Bárcenas, Undargarín, Diego Torres,  Millet, Vicente Villar, Francisco Correa, Jaume Matas, Jordi Pujol, etc, son nombres propios de una realidad sucia y lamentable.

Pero todo el mundo se aferra a su silla y se lava las manos, porque vivir en la pirámide es un lujo al que no quieren renunciar. Y cobrar en negro es un caramelito muy apetitoso y cobrar como el egipcio es una costumbre demasiado implantada (especialmente en el mundo del fútbol).

No entiendo porqué los recortes tienen que afectar a los/as menos favorecidos/as. A las personas con dependencias, a la sanidad, a la salud. Recortar la ley de dependencia es un crimen. El dinero no puede ser un baremo para salvar o no salvar vidas.

El 21% de IVA asesta un golpe mortal al cine, al teatro, a la música, a la literatura y las expresiones culturales.

La FIFa está siendo investigada y lo que puede salir es algo que no te puedes ni imaginar. Sobornos, estafas, inversiones fraudulentas, prevaricación, alevosía...todo menos juego limpio.

Los/as trabajadores/as autónomos/as, en lugar de ser incentivados/as, hacen milagros para sobrevivir.

Mis amigos profesores y profesoras de Mallorca fueron víctimas de un atropello monumental y tuvieron que encerrarse e ir a la huelga, con el perjuicio económico que supone. Todo porque los faraones no quieren sentarse a negociar. Pero no solo los de Mallorca, muchos coles han decidido abrir en vacaciones para que sus alumnos/as puedan comer al menos una vez al día... la situación de primaria y secundaria es lamentable.

La generación de faraones que en estos momentos toma las decisiones políticas se merece un éxodo indefinido al desierto.

Tenemos que exigir una ley de transparencia de verdad, un comité anti-corrupción y un tribunal de arbitraje. Las decisiones se tienen que tomar con sentido común, no con despotismo ( en este caso, nada ilustrado), no con formas dictatoriales, no con una doctrina fanática y caduca.

No quiero vivir en el pasado. Quiero vivir en el siglo XXI. La corte del faraón ya ha demostrado su ineptitud. No lo podemos consentir. Les deseo un varapalo en las elecciones. Y la inhabilitación de por vida.



Dedicado a Sacramento López, Sak